1. Lavar por separado para evitar la contaminación cruzada.
Separe las toallas blancas, de colores y oscuras y utilice detergentes adecuados.
Para las toallas que se utilizan con frecuencia en hospitales, gimnasios y otros entornos, utilice un desinfectante específico que contenga cloro o enzimas.
2. Lavado y enjuague a alta temperatura
El uso de agua caliente a más de 60 °C para un ciclo de lavado en circulación mata eficazmente las bacterias y los hongos.
Enjuague bien después para garantizar que los residuos de detergente y desinfectante se eliminen por completo y evitar la irritación de la piel.
3. Utiliza un desinfectante profesional
Los desinfectantes comunes incluyen hipoclorito de sodio (lejía) y sales de amonio cuaternario. Diluir según las instrucciones y dejar en remojo durante 10-15 minutos.
Para toallas de colores que no sean resistentes a la lejía, use un desinfectante oxidante (como peróxido de hidrógeno).
4. Secado y almacenamiento
Después del lavado, use una centrífuga de alta velocidad para deshidratar las toallas y luego séquelas en una secadora bien ventilada hasta que estén completamente secas.
Las toallas completamente secas inhiben eficazmente el crecimiento bacteriano y prolongan su vida útil.
1. Plegado estándar
Extiende la toalla, dóblala en tercios y luego dóblala nuevamente por la mitad para formar un rectángulo ordenado.
Para toallas cuadradas, dóblelas en diagonal para crear una forma de diamante para un acceso rápido.
2. Almacenamiento en capas
Guarde toallas del mismo tamaño o para el mismo propósito en el mismo estante. Utilice cajas o cajones de almacenamiento transparentes para separarlos y organizarlos fácilmente.
Coloque papel resistente a la humedad o desecante entre cada capa para evitar la humedad y el moho.
3. Almacenamiento de rollos
Guarda las toallas de baño o deportivas en rollos para ahorrar espacio y mantener su suavidad.
Asegure el rollo con un paño suave o cordón elástico para evitar arrugas al desplegarlo.
4. Etiquetado y seguimiento
Aplique etiquetas en el exterior de la caja de almacenamiento, indicando el material, el color y el escenario de uso de la toalla, para una recuperación rápida.
Utilice un sistema ERP para la gestión de inventario para realizar un seguimiento de las entradas, salidas y frecuencia de uso de toallas en tiempo real, mejorando la eficiencia de la gestión.